Reseña de El monstruo pentápodo de Liliana Blum
Previo: Los
niños no son imbéciles
Nunca
he acabado de comprender porque queremos inutilizar a los niños. ¿Por qué les
suavizamos las palabras? ¿Por qué les dulcificamos los hechos? Estoy de acuerdo
que no comprenden totalmente la gravedad de las cosas, ni que son conscientes
en su totalidad, pero estoy seguro que no son imbéciles, y sí se les explica
las cosas en la forma cruda que son podríamos ahorrarnos muchas cosas. No tengo
hijos aún, pero cuando los tenga, pienso hablarles con la verdad: que es el
sexo, que es la masturbación, que existe gente mala, que hay gente buena, y por
supuesto que intentaré no endulzarle el oído, solo para que alguien más no se
lo llegue a hacer.
¿Cómo lo
conseguí?
Recomendación
de un amigo, alias Esperancito.
Un poco acerca
del autor…
Recuerdo
haber leído su nombre por ahí, en charlas de libro, pero no la había leído. Cuando
acabé su libro, no pude refrenar mis ganas de preguntarle por tuiter algunas
inquietudes, ella muy amable me respondió. Spoiler: ya viene su nuevo libro, búsquenlo.
Reseña
Raymundo
es un hombre normal, respetado en su
comunidad. No guarda ningún secreto a primaria instancia, solo le gustan las
niñas pequeñas. Pequeño detalle. Esta es su historia.
A
través de una visión distorsionada, de una de las tantas caras de la realidad,
la autora nos desgarra a través de sus palabras, y se meterá en la mente de uno
de los personajes más cabrones que he leído.
Opinión
Demoré
en escribir mi opinión de Goodreads, no sabía si me mente había podido procesar
lo que había leído, tampoco estaba seguro en querer escribir una reseña, ya que
es un libro tan cabrón, denso e incómodo, que aunque no nos guste, todos
deberíamos leer.
El
tema principal en el que se basa, la pedofilia, es un tema muy extenso para
discutir. Evidentemente, sabemos que está mal, sabemos que a un hombre mayor le
gusten las niñas es algo incorrecto. Pero, ¿por qué? ¿Por qué los niños no son
conscientes? ¿No saben lo que es el amor? Eso sería a primera instancia, pero alguien
ha pensado en las personas que lo sufren.
¿Acaso los pedófilos son pedófilos por gusto? ¿Un pedófilo nace o se hace? Es
un tema tan denso que no me siento con el conocimiento para debatirlo sin caer
en falacias.
Entrando
en la psique del personaje principal, el hace una analogía muy sencilla y
eficaz, que te hace más cuestionarte sus acciones. Insisto, sabemos que está
mal, pero cada vez nos cuesta más saber el por qué. Sobra decir que el libro es
muy intenso, pero es algo que necesitamos leer, para darnos cuenta que no
estamos exentos. Nadie lo está.
La
narrativa es eficaz, aunque te sientes asqueado, tienes que saber que pasará, y
aunque sabemos las respuestas pronto, tienes que saber los detalles, los cómos,
los por qué, los para qué. El cambio entre los personajes y los tiempos me
agradó también, pero a veces solo quería que fuera más rápido. Me generó
bastante ansiedad y nerviosismo.
La
correlación que existe entre los dos personajes principales, es otra cuestión
digna de analizarse y desmenuzarse. ¿Acaso son los personajes perfectos para
una novela cruda? Yo diría que sí, que es una novela perfecta.
Los
monstruos están ahí, a la vuelta de la esquina, y están esperando por ti.
Citas
“No se sentía
capaz de escuchar sus discursos de autoayuda.”
“Las ganas de
morir seguían allí: la intoxicación era una realidad dolorosa.”
“¿Qué diferencia
haría si lo hubiera hecho? Un muerto más, un muerto menos. No iba a romperse
ningún equilibrio ecológico: si sobraba en el planeta eran los seres humanos.”
“Me parece que
este dolor no se irá nunca. Sólo se aleja y vuelve en oleadas. Entre una y otra
tengo la sensación de que puedo sobrevivir.”
“Esa etapa del
amor en la que es mucho más fácil aceptarlo todo.”
“No se trataba
sólo del momento de estar físicamente juntos: toda su vida se había mejorado y
cada aspecto era más disfrutable que antes.”
“¿Sería que a
los fenómenos les cautivaban las historias de fenómenos más desgraciados que
ellos mismos?”
“Hay preguntas
incomodas que no nos atrevemos a hacernos porque intuimos que la respuesta no
nos gustará.”
“No sé si esto
sea algo común: me resulta más fácil acordarme del tono de tu voz que de las
facciones de tu cara.”
“Apretó los
parpados y pidió con todas sus fuerzas estar en cualquier otra parte menos
allí. O muerta. No estar ahí bastaría.”
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