Reseña de La fila india de Antonio Ortuño

Título: La fila india

Autor: Antonio Ortuño

Editorial: Océano

Edición: Físico

Género: Drama

País donde sucede: México

País de origen del autor: México

Libros leídos del autor: 4

Páginas: 245

Días para acabarlo: 3

Calificación personal: 4.7/5

Previo: Burocracia mex-i-can-t

¿Ubican cuando gobernación o alguna otra secretaria importante hace un boletín de prensa como respuesta a algún desastre? Son tan metódicos, correctos y propios que te lo hacen creer en sus palabras. Te hacen creer que están realmente conscientes de la situación, pero sobre todo te hacen creer que habrá una solución real y que ayudarán. Nada más falso, no hay nada más falso que la burocracia mexicana. Ellos son el ejemplo de la frase: “quedabien”, lo cual no está tan mal, me refiero a que tenemos una reputación que cuidar… aunque en la realidad la estemos pasando peor. El gobierno mexicano siempre será ese adolescente que le preocupara el qué dirán.

¿Cómo lo conseguí?

El tercer libro en fila que leo de ese fructífero viaje a Guadalajara

Un poco acerca del autor…

Ortuño ya no es un novato para el blog, poco a poco se vuelve un viejo conocido, y con cada libro de él intento comprender sus motivaciones. Aún tenemos más libros que leer de él, esto es solo el comienzo.

Reseña

Un hecho traumático se da al sur de México, por lo cual Irma y su hija son mandadas a cubrir una vacante en la Comisión Nacional de Migrantes. Poco a se darán cuenta del trato a los migrantes en esta parte del país.

A través del retrato de los migrantes, y del reflejo de cómo se tratan en nuestro país, se presenta “La fila india” un libro que es más que necesario leer en estas vísperas.  

Opinión

No estoy apenado por no haber leído este libro antes, me lo habían recomendado, pero definitivamente no pudo haber habido un mejor momento para su lectura. El tema de los migrantes centroamericanos está calientito en nuestro país (sí, más que antes). Así que sirvió de una profunda reflexión. Uno como mejicano siempre se queja como tratan a nuestros paisanos en la frontera del norte, pero no nos permitimos bajar la mirada al sur, y ver que los tratamos mucho peor.

El tema de los migrantes es solo un pretexto para querer contar otras historias (no por eso deja de asquear el parecido a la realidad actual): una mujer que huye de su marido, un marido que tiene serios problemas de identidad, una mujer viviendo en México, un hombre solo que guarda secretos, un puto país que solo mira lo que le conviene. Hay tantas historias, tantos ramales que una semana después estoy comprendiendo la profundidad de las mismas.

La narrativa es un poco más densa que en otras ocasiones, se vuelve más brusca por momentos, y hace saltos menos perceptibles. Aun así es totalmente entendible y cada personaje cuenta su propia historia sin llegar a confundir. La primer parte es lenta, pero una vez que toma ritmo no para, hasta llegar a un final subversivo, dramático y excitante. Me encantó el final, me supo muy mejicano.

En cuanto a lenguaje y como muchas personas se han referido últimamente, ni me asusté, ni me pareció indebido. En esta ocasión me parece más pertinente y menos forzado. La genialidad del libro radica en que quieres saber más de la situación, quieres saber cómo se sienten y una mezcolanza asombrosa.

Es un libro agresivo, soez, denso y totalmente crudo que sirve de perfecto ejemplo para ayudar a concientizarnos. Ahora, y más que nunca me percato que la empatía nos hace falta muchísima empatía. Nos hace falta mirar a ambos lados antes de emitir un juicio.

El gobierno como perfecto ejemplo de una fila india…

Citas

“El fuego. Sus efectos sobre el cuerpo. La piel, como una tela, se aparta de la carne, desnudándola.”

“No es el tono de piel sino el dinero el que te hace aceptable.”

“Allí correspondía que le dirigiera un discurso institucional invitándola a confiar en la investigación y el aparato de justicia, pero no lo hice porque me habría sentido pendeja.”

“A veces, por más agotado que me deje el esfuerzo físico de poseerla, no concilio el sueño. Temo que me delate, temo, sobre todo, que huya.”

“Nunca una relación de oficina ha logrado pasar incógnita ante los ojos de quienes la rodean. Puedes ocultarte bajo la última piedra del desierto pero sabrán si te acuestas con alguien. Lo huelen. Lo lamen del aire.”