Reseña de: El marciano de Andy Weir

Oh, mira un dedo...

Título: El marciano

Autor: Andy Weir    

Editorial: Nova- Ediciones B

Género: Ciencia Ficción

Planeta* donde sucede: Marte   

País de origen del autor: Estados Unidos

Páginas: 407

Calificación personal: 4.3/5

Previo: El valor –monetario, intelectual, físico- de un hombre    

Seré directo: ¿cuánto vale un hombre? Puede que para algunos mucho, puede que para otros poco. Pero, ¿qué es lo que le da ese valor a la vida de un hombre? ¿Su color de piel, su nacionalidad, su capacidad monetaria, su inteligencia? ¿Qué es? En todas estas preguntas podríamos diferir, pero estaríamos de acuerdo en que no todos los hombres valen lo mismo… y sé que así debería ser, todos deberíamos valer lo mismo, pero todos sabemos que eso no es verdad en nuestra sociedad. La premisa del libro es rescatar a un hombre que se quedó atrapado en Marte, pero ¿él es acaso tan valioso para invertir miles de millones de dólares en su rescate? Yo estuve en discordia con esta idea todo el libro, pero al final se aclaró de una forma magnífica… aunque no me acabé de creer el motivo. La gente siempre tiene intereses recónditos…

¿Cómo lo conseguí?

Ya me habían hablado de este libro, me dijeron que tenía que leerlo, pero honestamente se me hacía caro. De hecho es una inversión cara si la comparas –directamente- con el tiempo que tardé en leerlo. Así que por fin me decidí y lo compré con un pequeño descuento. No es que me haya arrepentido de comprar un libro… sino que esperaba un poco más.

Un poco acerca del autor…

Autor de origen californiano, en nuestros días sería clasificado como un “friki”. He leído varias críticas y en la mayoría decían que este libro era uno de los mejores en el género desde hace mucho tiempo. Es ciencia ficción pura, toma los tecnicismos indicados… pero deja un poco de lado las cavilaciones del hombre (siendo una inconcordancia cuando toda la novela se centra en un hombre). En fin, habrá que leer algo más de él para poder criticarlo abiertamente…

Reseña

Día seis de la misión. Ha ocurrido un desastroso inconveniente, la tripulación ha dejado en Marte al astronauta Mark Watney. El panorama no es nada alentador… lo han dejado porque creían que había muerto, y la verdad es que se salvó gracias a su ingenio, y claro, un poco de suerte. Ahora su cometido será sobrevivir hasta que lo rescaten… o algo así.

Después del “olvido” Watney se dedica a pensar fríamente cómo sobrevivir por más de un año con escasas provisiones de distinta índole. Mientras tanto la NASA solamente se dedica a observar… no hay mucho que hacer sin comunicación… la antena que provee la conexión fue la que causó la muerte de Watney. Entretanto Marte sigue con su frío y duro curso… donde nada sucede (?).

A través de los largos y fríos desiertos de Marte se encuentra el solitario Watney, desesperado por sobrevivir a esta gran adversidad que se le ha puesto enfrente: sobrevivir en otro planeta por más de un año y no morir en el crudo entorno. Por medio de su ingenio, habilidad y buen sentido del humor Watney se encontrará pruebas y necesitará usar todo su ingenio para no quedarse a cosechar patatas marcianas toda su vida… sólo existe una oportunidad de salvarse. ¿Logrará escapar de Marte o será devorado por la soledad y las condiciones inhóspitas de este planeta? El marciano es una extensa radiografía de la ciencia ficción… moderna.

Opinión

¿Qué ha cambiado de la ciencia ficción de los ochentas a la fecha? Parece que nada. Parece que es sumamente difícil igualar a las mentes que imaginaban inteligencia artificial, naves voladoras y autómatas. La cuestión es que la ciencia ficción antigua fue demasiado lejos y ahora es complicado sobre pasarla sin parecer que se cae en las mismas ideas. La única constante que se –debería mantener- son las cavilaciones humanas. La ciencia ficción actual tiene un gran reto enfrente… casi como el de Mark Watney de salir con vida de otro planeta.

Al libro, a las descripciones y a la narrativa le agradezco enormidades que me hayan permitido evocar y revivir los paisajes de Crónicas marcianas. Hubo una parte –mi favorita- donde se describe un inmenso cráter, yo podía imaginar las partículas de polvo, la arena roja y el pálido cielo que se ciñe sobre el desierto. La otra parte que más rescato de la novela es que Watney siempre tiene buen sentido del humor –aunque esté solo en un planeta desconocido-… y te genera una empatía a lo largo de la obra. Tal vez por eso esperaba un final diferente…

                                                                                                                                                           

La narrativa es sencilla… excepto cuando se explican cuestiones técnicas, aquí se profundiza demasiado, y aunque está bien explicado, no deja de ser tedioso. Hubo algunos temas de los cuales me gustó saber más, y hubo algunos de los cuales ya tenía nociones… pero yo he estudiado ingeniería. Me encantaría saber la opinión de alguien a quién no le guste la ciencia, para saber sí le pareció tan tedioso o más que a mí. En cuanto a la división de capítulos se dividen en entradas del diario personal de Watney y en las intervenciones con… otros… personajes.

No es que haya odiado el libro, sino que esperaba muchísimo más de toda la obra. A lo mejor yo quería marcianos o algo así… en realidad no sé qué esperaba, pero lo que leí no se acercó. El libro en sí es una bocanada de aire fresco para la ciencia ficción moderna… por el simple hecho de que no se ha visto mucha ciencia ficción últimamente; la fantasía la ha desbancado a niveles ínfimos. Creo que a los fans de hueso colorado les parecerá suficiente, pero no les encantará. Dirán que es algo nuevo y bueno, pero no bastará.

Los personajes te generan empatía y me parece que te dan una idea de sus motivantes, sin profundizar demasiado. Y aunque todo el libro “estamos” con Watney no acabamos de saber lo suficiente de él, nos quedamos con la parte más superflua. Tal vez esto fue lo que faltó y que yo esperaba. Una intensa conversación con él. La traducción viene de España y con ella vienen esas típicas palabras chuscas.

¿Cuándo es que un “terrícola” se vuelve “marciano”? ¿Cuándo respira su aire, siembra su tierra o cuando bebe su –inexistente- agua? Tal vez al final del día un marciano sólo es aquel que quiere escapar de Marte lo antes posible…

"Supongo que si existe un Dios no le importará, teniendo en cuenta la situación en la que me encuentro."

"Dicen que ningún plan soporta su puesta en práctica. Estoy de acuerdo."

"¿Cómo será estar atrapado allí? Cree que está completamente solo, que nos hemos olvidado de él. ¿Qué clase de efecto surte eso en la psique de un hombre?"

"Cuando se enfrenta a la muerte, la gente desea ser escuchada. Nadie quiere morir en soledad."

"El espacio es peligroso. Es lo que hacemos aquí. Si quieres estar a salvo todo el tiempo, vete a una compañía de seguros."

"Nunca me había fijado en el silencio absoluto de Marte. Es un mundo desierto sin prácticamente atmosfera para transmitir el sonido. Podía oír mis propios latidos."

"Si pudiera pedir algo, pediría que la hermosa reina de Marte de piel verde me rescatara para que ella aprendiera mucho más de eso tan terrenal llamado 'hacer el amor'."